Páginas

domingo, 15 de febrero de 2009

¿Qué quiere lograr la Consejería con el Area Unica y la libre elección?

Un paso más en la política de privatización de la sanidad pública madrileña

El área única y la libre elección son, en realidad, los instrumentos para desestructurar definitivamente el Sistema Sanitario Público (ya bastante afectado con la apertura de los nuevos hospitales privados), reducir al mínimo los derechos de los trabajadores, romper la planificación sanitaria y traspasar al sector privado aún más fondos públicos mediante la derivación de los pacientes, procesos y técnicas que les sean rentables.

Fuente: Mi salud no es un negocio

El establecimiento del área única y la libre elección de “todo”, es un paso más en la política de privatización de la sanidad pública madrileña que desde 2004 está llevando a cabo el PP, política que comenzó con la licitación de los nuevos hospitales y el estrangulamiento económico de los centros públicos, mientras se incrementaban los fondos destinados a conciertos privados, la congelación de plantillas, las propuestas de remodelación de los grandes hospitales,...

Ahora, bajo el bonito disfraz de una supuesta “libre elección” y el “todo vale”, se esconde la mayor agresión realizada hasta la fecha en nuestro estado contra usuarios y trabajadores de la sanidad pública. Ninguna comunidad ha llegado tan lejos; se trata de desestructurar el sistema y acabar con los derechos de los trabajadores:

* Realizando movilidades forzosas indiscriminadas por toda la Comunidad de Madrid, tanto en primaria como en especializada (incluso a los hospitales de gestión privada, que de otra forma no están pudiendo cubrir y, así, desmantelando aún más los públicos).

* Sentando las bases de un supuesto “mercado interno” basado en la introducción de la competencia entre centros sanitarios públicos y privados (“que el dinero siga al paciente”), lo que se traducirá en una lucha empresarial por los usuarios “rentables” y un rechazo de los “no rentables”, que acabarán inevitablemente en centros de segunda categoría tipo beneficencia.

¿PERO ES QUE NO HA DEMOSTRADO YA BASTANTE EL MERCADO SU FRACASO CON LA ACTUAL CRISIS?

* La “incentivación” de los centros y servicios “más eficientes” traerá consigo la “desincentivación” de los que no lo sean, lo que junto a la “facturación entre hospitales”, dará lugar al crecimiento y mejora de unos y el progresivo deterioro de otros (con toda seguridad, aquellos a los que no tengan más remedio que acudir los pacientes menos rentables y más desfavorecidos económicamente).

* Cediendo a los hospitales el control de los centros de salud de su zona geográfica para integrarlos en su modelo económico (instrumento para tratar de reducir el gasto).

* Rompiendo la continuidad asistencial al traspasar los avisos domiciliarios a médicos/personal de enfermería diferente del elegido.

* Aumentando las tareas del personal intermedio sin aumento de plantillas (enfermería, matronas, fisioterapeutas….) para reducir las cargas del personal facultativo; posiblemente, sin la cobertura legal pertinente (triajes, prescripción/indicación de medicación, ….).

* Para el personal facultativo –médicos de familia y pediatras-: transformación de la productividad fija en incentivos variables sujetos al cumplimiento de objetivos economicistas (incentivos perversos), no de calidad asistencial, y que podrían comprometer la deontología profesional (más dinero si se deriva menos a especializada, si se reducen las bajas y su duración, si se produce ahorro en farmacia y pruebas diagnósticas,...).

* Para el personal no sanitario: incremento aún mayor de cargas, sin reconocimiento profesional y puesta en marcha de un call center, que podría en el futuro entregarse a una empresa privada.

La libre elección indiscriminada es una falacia dado que, a pesar de las promesas, no se va a ofrecer a la población la información objetiva necesaria para poder ejercer ese teórico derecho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario