Pero luego los jueces hacen huelga por la "carga de trabajo".
No están peor que antes. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) considera que el aumento de niños en las aulas de las escuelas infantiles madrileñas -las clases de dos años pasan, por ejemplo, de 16 a 20 alumnos- no tienen consecuencias negativas para la calidad ni para el trabajo de los educadores. Así lo determina una sentencia del Alto Tribunal que ayer hizo pública la Consejería de Educación (?).
El Ayuntamiento de Getafe recurrió el decreto de mínimos que permite ampliar las ratios en las guarderías por varios motivos.
Primero, porque la Comunidad no contó con los municipios para su elaboración. Segundo, porque Educación cambió la puntuación de acceso en centros municipales y regionales y, en tercer lugar, porque crece el número de alumnos pero no de personal en cada aula. Los tres argumentos han sido desestimados en la sentencia, del 18 de febrero. Getafe la recurrirá para "intentar frenar la marcha atrás que está dando la educación", según Carmen Duque, edil de Educación en el municipio.
Fuente: El País
El decreto, que ha provocado protestas, manifestaciones y huelgas, es una normativa que sólo dura un curso. El tribunal lo compara precisamente con el decreto vigente en 2007. En la orden previa, se permitía "por razones organizativas y pedagógicas" agrupar más niños en el aula. La que está ahora en vigor lo permite en todos los casos, pasando de 12 a 13 niños en el tramo de uno a dos años y de 16 a 20 en el curso de dos a tres. El TSJM entiende que no hay "diferencias sustanciales" entre ambos.
La Red de Atención a la Infancia de la Comisión Europea señaló como objetivo para 2006 un especialista por cada cuatro menores de un año, por cada seis niños de dos años y uno para un máximo de ocho niños de tres. En Madrid se permite justo el doble. Educación destaca que las nuevas ratios han permitido que más de 4.700 nuevas familias obtuvieran plaza en un centro público este curso.
La Junta de Portavoces de Escuelas Infantiles Públicas considera "una barbaridad" la sentencia, según su presidenta, Carmen Ferrero. "Ya 16 niños en un aula es excesivo, con 20 es imposible trabajar", añade. Y pone un ejemplo: "Con 20 niños de dos años en una clase el maestro no puede estar atento a cómo aprenden a hablar ni garantizar que no se tire el puré. Los educadores están estresados".
Es increible como se puede llegar a falsear la realidad de manera que al final parezca que lo que no es verdad si que lo sea.
ResponderEliminarAhora resulta que no tiene consecuencias negativas que donde antes había 16 niñ@s ahora haya 20 (en el mismo espacio, con menos personal) ni para las criaturas ni para los profesionales de la educación infantil. Pues, nada, que visiten un aula con 20 niñ@s de dos años y pasen una jornada lectiva completa con ellos para ver que tal la experiencia.
Además hacen demagogia haciendo alusión a las 4.700 nuevas familias que han obtenido plaza: si queremos más plazas públicas lo que debemos hacer es construir más escuelas infantiles públicas en lugar de hacinar a los niñ@s.
Sorprende por otra parte como solamente miramos a Europa cuando nos interesa..
Además cuando se van a enterar que los centros donde se imparte educación infantil de primer ciclo son Escuelas Infantiles y no guarderías.
En fin totalmente indignante.