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jueves, 5 de noviembre de 2009

FAMMA solicita medidas inclusivas en la educación de las personas con discapacidad

Contra la homogeneidad: por modelos específicos para las personas con discapacidad

La Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA-Cocemfe) ha solicitado que se introduzcan medidas inclusivas en la educación de las personas con discapacidad para lograr un mayor y mejor desarrollo en la formación que favorezca la competitividad del colectivo en el mercado laboral, a la vez que se consigue una mayor integración social.

Según plantea FAMMA, "es preciso exigir una política educativa cuyo principal objetivo sea la educación inclusiva que haga posible que todos los niños reciban una educación de calidad, en un contexto acorde a su lugar de pertenencia que evite desplazamientos que determinan su desarraigo social, y un adecuado cuadro de profesionales que cubran sus necesidades de apoyo si se quiere incluirle y no excluirle de la sociedad".

Fuente: Famma-Cofence

Así, la Federación se suma a las propuestas del CERMI-Comunidad de Madrid, que incluyen la reclamación de modelos específicos de educación para personas con discapacidad que aludan a la heterogeneidad de dicho colectivo, un aumento de los profesionales especializados y un continuo reciclaje de los mismos, incorporación de profesionales sanitarios (enfermeros y fisioterapeutas) en las escuelas infantiles y colegios de educación infantil, y la representación del colectivo en los distintos Consejos de participación de la Consejería de Educación.

"Las necesidades reales de las personas con discapacidad no son recogidas según su realidad social y se atiende unificando su situación a la de otros colectivos. Es decir, se aplica la política de 'café para todos' de manera indiscriminada y por tanto, errónea, por lo que creemos necesaria la creación de modelos específicos de educación para este colectivo", añadieron.

Y es que, según el colectivo, "hay una necesidad imperiosa de poner en marcha figuras de coordinación entre consejerías para aplicar un trabajo transversal, eficaz y eficiente", especialmente en materias tan sensibles como la educación, que "supone una barrera añadida a la condición de discapacidad que impide la competencia en igualdad de condiciones".

"Para adquirir un buen nivel de inserción es necesario la implicación de los poderes públicos y se ofrezcan oportunidades de acceso a la formación en todos los niveles", añadieron, recordando que "ser discapacitado no es sinónimo de persona dependiente".

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