Interesante análisis sobre la actitud desleal de Esperanza Aguirre y sobre lo que no esta haciendo el psoe.
La rebelión es un delito contra el orden público y los poderes del Estado, penado por la ley. En ningún país sensato y democrático una autoridad pública se atreve a hacer llamamientos a la rebelión como si fuera un chiste. !Cuesta imaginarse a un presidente de un Estado federado alemán, a una autoridad regional francesa, a los que se les pase por la cabeza que pueden llamar a la rebelión de los ciudadanos contra una ley del Parlamento!
Seguir leyendo en El País 14.03.2010.
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