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martes, 30 de agosto de 2011

Carta de La Presidenta al profesorado cabreado

Soy plenamente consciente (¿?)

Hace falta ser prepotente para encabezar la carta como lo hace Esperanza Aguirre, debe ser por el momento "papa" que vivió cuando genuflexa perdió el sentido. Encabezar "La Presidenta" en cuerpo mayor, centrado da a entender por dónde va a ir la carta.

Segundo la persona y el número (tercera del plural) "ustedes" (los de la posible huelga) en una carta personal uhmmm, tampoco, tampoco llega.

Tercero, la valoración de que el recorte "va a permitirnos no aplicar recortes en otras partidas esenciales para mejorar la calidad de la enseñanza". Nadie se lo puede creer porque eso sería aceptar que a Aguirre le interesa la calidad y no es así, sólo le interesa la propaganda, a la que nunca renunciará.

La realidad: recortes a la pública, privilegios a la privada.

Qué tal si hablamos del 80% de descuento en los 600.000 bonometros turísticos. Ah… que la iglesia católica y sus patrocinadores no tienen que hacer esfuerzos.

Conclusión: ¡Que dimita Figar!
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3 comentarios:

  1. Una de las cosas que más retrata a los "neoliberares" es que piensan que a las personas se las compra con dinero. La mejor manera de romper la solidaridad es dando "incentivos económicos" y que no haya negociaciones colectivas.

    En Educación ya han utilizado este método con los complementos a los equipos directivos, con las comisiones de servicio aquí y allá a este y a aquel, concediendo privilegios a determinados centros y poniendo en listas negras a otros.

    Tres ejemplos:

    1) Para acabar con las posibles críticas a las pruebas CDI, les ha bastado con ofrecer algo de dinerito a los aplicadores.

    2) Con la supresión de los CAP se ha roto la solidaridad entre centros de una zona y la oportunidad de hacer puestas en común.

    3) Con el programa bilingüe y los centros específicos se ha roto la unidad del sistema educativo introduciendo criterios de competencia malsana de "sálvese el que pueda" y "yo me abro paso a codazos y zancadillas".

    Lo malo y lo triste es que, de momento, les van funcionanando estas estrategias de CAMBIAR IDEALES POR INTERESES.

    Si esto se hubiese coratdo a tiempo defendiendo la LOE y desarrollándola con vigor, tal vez, otro gallo nos cantaría.

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  2. Totalmente de acuerdo, ese aspecto le da un punto "vitocorleano" que no había que olvidar.

    De cualquier modo la carta es un desbarajuste como argumentación de principio a fin, pero también una prueba del miedo de Esperanza Aguirre

    Además ¿por qué la carta no está firmada por Lucía Figar?

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  3. Escribir cartas a los profesores, quizá sea una copia de la idea que tuvo Sarkozy y que le gustó mucho a Alicia Delibes en su momento.

    Ver aquí

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