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sábado, 21 de diciembre de 2013

#LOMCE, con M de mentira: ¿una ley basada en evidencias?

El preámbulo de la LOMCE es un disparate, una gran mentira. 


En el preámbulo se ofrecen datos falaces, conclusiones falsas, recomendaciones inventadas; y lo más grave es que reitera que hace esto a partir de la evidencia. Se afirma estar al margen de los debates ideológicos y se amparan las medidas adoptadas en las ¡recomendaciones! de PISA y otros estudios internacionales –que dudamos que hayan leído y menos entendido–.

El preámbulo, para consumo externo, utiliza una especie de neolengua donde con la jerga actualizada del debate educativo internacional se incluyen el conjunto de medidas elitistas, segregadoras y reaccionarias que caracterizaron los treinta primeros años del franquismo. La agenda propia de la derecha hispana envuelta en el lenguaje de la posmodernidad educativa.

Mentiras peligrosas. Mentiras con piel de cordero. Mentiras reaccionarias.

Mentiras que nos proponemos desmontar. Mañana comenzamos.
Preámbulo de la loMce

Sin embargo, el sistema actual no permite progresar hacia una mejora de la calidad educativa, como ponen en evidencia los resultados obtenidos por los alumnos y alumnas en las pruebas de evaluación internacionales como PISA (Programme for International Student Assessment) (Primera mentira, la evolución ha sido clara y positiva con resultados por encima de la media)

La objetividad de los estudios comparativos internacionales, que reflejan como mínimo el estancamiento del sistema, llevan a la conclusión de que es necesaria una reforma del sistema educativo que huya de los debates ideológicos que han dificultado el avance en los últimos años. 
(Segunda mentira, lo que ha dificultado la evolución de los últimos años ha sido el fundamentalismo ideológico de la derecha. La lectura de los estudios comparativos internacionales que hace el pp no es objetiva sino distorsionada e interesada)

La técnica normativa elegida, de modificación limitada de la Ley Orgánica de Educación (LOE), responde a las recomendaciones de la OCDE basadas en las mejores prácticas de los países con sistemas educativos con mejores resultados, en los que las reformas se plantean de manera constante sobre un marco de estabilidad general según se van detectando insuficiencias o surgen nuevas necesidades. (Tercera mentira, ¿dónde están esas supuestas recomendaciones?) La propuesta de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) surge de la necesidad de dar respuesta a problemas concretos de nuestro sistema educativo que están suponiendo un lastre para la equidad social y la competitividad del país, primando la consecución de un marco de estabilidad y evitando situaciones extraordinarias como las vividas en nuestro sistema educativo en los últimos años. (Cuarta mentira, perjudicará la equidad y la competitividad. ¿Qué situaciones extraordinarias ¿la del boicoteo de la LOE llevada a cabo desde la Comunidad de Madrid?)

Los cambios propuestos en nuestro sistema educativo por la LOMCE están basados en evidencias. La reforma pretende hacer frente a los principales problemas detectados en el sistema educativo español sobre los fundamentos proporcionados por los resultados objetivos reflejados en las evaluaciones periódicas de los organismos europeos e internacionales. (Quinta mentira, además repite argumentos previos, mala redacción)

Los estudios internacionales ponen de manifiesto que los países que han mejorado de forma relativamente rápida la calidad de sus sistemas educativos han implantado medidas relacionadas con la simplificación del currículo y el refuerzo de los conocimientos instrumentales, la flexibilización de las trayectorias de forma que los estudiantes puedan elegir las más adecuadas a sus capacidades y aspiraciones, el desarrollo de sistemas de evaluación externa censales y consistentes en el tiempo, el incremento de la transparencia de los resultados, la promoción de una mayor autonomía y especialización en los centros docentes, la exigencia a estudiantes, profesores y centros de la rendición de cuentas, y el incentivo del esfuerzo. (Mentira tras mentira, nada de esto es puesto de manifiesto por los estudios internacionales, más bien todo lo contrario. Polonia y Alemania mejoran porque posponen los itinerarios, los sistemas censales son minoritarios y correlacionan con peores resultados… ya lo del esfuerzo es la traca final, puro FAES)

Esta reforma del sistema educativo pretende ser gradualista y prudente (mentira), basada en el sentido común (mentira) y sostenible en el tiempo (mentira), pues su éxito se medirá en función de la mejora objetiva de los resultados de los alumnos y alumnas. Esta Ley Orgánica es el resultado de un diálogo abierto y sincero (mentira), que busca el consenso (mentira), enriquecido con las aportaciones de toda la comunidad educativa (mentira).

Fuente: loMce

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