Leemos en el artículo Balance de un fracaso (El País Domingo 10.06.2012) la retribución (escandalosa) de los consejeros de BFA/Bankia/Caja Madrid.Vemos que Arturo Fernández Álvarez, presidente de CEIM, administrador único de Restaurantes Hoteles Cantoblanco, propietario de diversos colegios como Peñalar y Peñalvento, beneficiario de la concesión de escuelas infantiles de gestión indirecta (aunque luego renunciara) se llevó en 2011 la cantidad de 278.000 euros.
Sabemos que Arturo Fernández donó dinero (entre otros como Diaz Ferrán o Unión Fenosa) a Fundescam y que este dinero contribuyó a la financiación ilegal (por mucho que haya prescrito como delito) de la campaña electoral del PP en 2003 que acabó, tamayazo de por medio, llevando a Esperanza Aguirre a la presidencia de la Comunidad de Madrid.
Desde entonces la utilización de los recursos públicos para favorecer (recompensar) a amigos y negocios privados, así como el vaciado de las arcas públicas para cercenar la igualdad social de raíz han sido el leitmotiv del desgobierno madrileño. Quien ha practicado una política negligente en lo político, en lo económico y en lo social no es digna el cargo que okupa, ni un día más.
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