No estaríamos hablando de la calidad para las aulas de 8 meses si, por ejemplo, fueramos Noruega. Allí tras la "baja maternal" tendríamos una "baja parental" con lo que no existen, prácticamente, niños de 8 meses en una escuela infantil ni por tanto necesidad de ese debate. Una buena educación es cara, más cara cuanto más pequeños los niños pero además en el caso de los niños vemos que es necesario tener en cuenta simultáneamente los derechos de la infancia y los de las mujeres, debido a que históricamente han estado entrelazados y en el caso de las mujeres subordinados.No cabe duda de que el actual modelo resulta explotador para la infancia, las mujeres y la sociedad, pero ¿cuál es el modelo alternativo que combine emancipación de las mujeres y derechos de la infancia?. Los dos artículos que os enlazamos analizan este tema, en ambos participa María Pazos Morán.
El primero cuestiona que el trabajo temporal dirigido a las mujeres, que forma parte de las medidas contra la crisis sea una herramienta que favorezca la igualdad de las mujeres: Parcialidad en la reforma laboral. María Pazos Morán.El Páis 28.03.2010.
El segundo recoge la noticia de una plataforma PPIINA que recoge firmas para equiparar los permisos de maternidad y paternidad en duración y con carácter obligatorio entendiendo que es imprescindible la participación de los hombres en el cuidado de l@s más pequeñas: Razones para igualar las bajas paternales. Público 5.04.2010
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