viernes, 15 de junio de 2012

Carta abierta al Ministro Wert sobre los programas bilingües de inglés

Interesante reflexión colgada en el blog del Ampa La Latina


Sr. Ministro: Usted ha anunciado la intención de su gobierno de extender el programa bilingüe de inglés en la enseñanza por toda España. Como residente en la Comunidad de Madrid, he sido testigo y usuaria (mi hija) de dicho programa en esta Comunidad, que lleva años implantándolo y publicitándolo como su gran apuesta de futuro en materia educativa. Creo que es urgente y necesario evaluar y cuestionar dicho programa: sus resultados, su viabilidad en el actual formato y si es la inversión que los niños y el futuro del país necesitan.

Fui profesora de inglés durante 8 años; soy licenciada en Traducción, tengo el Proficiency de Cambridge desde el año 83, de niña iba a Inglaterra los veranos y de adulta he vivido en países anglosajones.

No soy la única en estar convencida de que el programa educativo bilingüe de la Comunidad e Madrid, es una absurda inversión de recursos, pedagógicamente un fracaso y peor aún, que amenaza con degradar (más) la calidad de la enseñanza en los centros públicos. (sigue en el desplegable)
1. ¿Bilingües?
Lo primero es llamar a las cosas por su nombre. El término “bilingüe” es confuso, y se ha aprovechado su indeterminación para hacer un uso propagandístico y tramposo del mismo: Hay quien lo usa para indicar que un hablante es capaz de comunicar en 2 lenguas, independientemente del nivel (y así lo está usando la CAM). Sin embargo, en el contexto de la enseñanza, cuando decimos “niños bilingües” generalmente se entiende la acepción más lingüística del término que implica un control nativo de ésta. Hasta hace unos años “colegio bilingüe” implicaba un centro donde:
a) los niños, aprovechando su capacidad innata, aprendían una lengua alcanzando al final de la primaria una competencia nativa
b) casi todos los profesores del centro eran nativos de la lengua en cuestión.

Ninguno de estos dos requisitos se cumplen en los ”colegios bilingües” de la CAM; pero el término ha sido usado como reclamo publicitario por su capacidad de dotar a las clases medias de un deseado prestigio social. Sería más honesto llamarlos algo así como “colegios con inglés reforzado”. Pero aún así, lo esencial es preguntarse si su funcionamiento es óptimo, si el esfuerzo humano y de recursos merece la pena para los resultados obtenidos, y si se podrían obtener los mismos resultados con un sistema más sencillo, más realista y más ajustado a nuestras posibilidades.

No es posible implementar un verdadero programa bilingüe sin un número importante de profesores nativos que impartan las materias. Es cierto que existen algunas personas no nativas cuyo dominio del inglés les permite una fluidez cercana a la de un nativo, necesaria para ser capaz de transmitir contenidos en un aula de manera eficaz (lo que en el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas se clasifica como hablante competente C1). Pero éstas no abundan en España (requiere haber vivido largo tiempo de inmersión en un entorno anglosajón) y no suelen ser profesores.

2. La habilitación de los profesores
Muchos de los profesores que fueron habilitados para participar en el programa bilingüe de primaria recibieron la formación especifica de la CAM, que consiste en un curso de 30 horas de la metodología AICOLE  y 4 semanas de estancia en una universidad anglosajona partiendo de un nivel B2 (niveles según el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas), y lo mismo más un curso de 100 horas para los de nivel B1 (ambos niveles evaluados por la Consejería).  Ni el nivel B1 ni el B2 capacitan a nadie para impartir clases en una lengua, y ni 4 semanas, ni 10 en una universidad extranjera son suficientes para hacer que un adulto pase de un nivel B2 a un C1 (usuario competente). Ahora, la habilitación se realiza mediante una prueba, que según la CAM, garantiza el nivel C1.

Muchos profesores habilitados del programa bilingüe de la CAM no tienen un nivel C1, al menos en su competencia oral. Y lo afirmo basándome en mi propia observación y también en la de otras madres y padres (algunos nativos y profes) de niños en escuelas bilingües de primaria. Muchos hemos observado el bajo nivel de inglés y la pésima pronunciación de un numero importante de profesores/as, y como ejemplo diré que una de ellas, profesora de 3ª de Science, preguntaba, al preparar la lección, el significado de “breathe”; conozco varios casos en los que niños realmente bilingües, (hijos de padre o madre anglosajón) comentan a sus madres que la profe no sabe hablar inglés.

La prueba de habilitación de la CAM está dividida en 2 fases: La primera prueba determina el conocimiento pasivo de la lengua (comprensión) y el dominio de la gramática, todo ello por escrito. De esta prueba están exentos varios colectivos, entre otros, quienes hayan cursado el Plan de Formación Específica diseñado por la Conserjería de Educación. La segunda fase, la oral, que es la que pondrá de manifiesto la competencia real del profesor, puede durar entre 10 y 20 minutos en los que el candidato hablará “sobre temas de actualidad en general o relacionados con el sistema educativo” (BOCM, ORDEN 1672/2009, de 16 de abril). El tribunal a quien corresponde la elaboración de los ejercicios y la calificación de las pruebas es designado por la Dirección General de Recursos Humanos de la Consejería de Educación y no por un órgano independiente;  y el BOCM, en lo relativo a la capacitación lingüística del tribunal tan sólo indica que sus miembros serán elegidos “de entre funcionarios de carrera con la formación lingüística suficiente” sin especificar qué se considera suficiente. En cualquier caso, no son hablantes nativos de inglés y pertenecen a un colectivo interesado en la implementación del programa.

Pero lo que quizá muchos desconocen es que incluso un título de traducción o de filología puede no garantizar en absoluto la competencia lingüística oral y activa del titulado, y sin ésta, no es posible dar clases. Existen traductores incapaces de hablar la lengua de la que traducen. La realidad a la que los políticos, y gran parte de la comunidad educativa y de las familias se han empeñado en dar la espalda es que para un adulto hispanoparlante aprender a hablar inglés de manera realmente fluida es algo muy difícil (puesto que nuestra lengua no comparte raíces directas con el inglés), que requiere un volumen de tiempo y de inmersión lingüística muy considerable no asumible por las instituciones.  Por otro lado, ser capaz de transmitir contenidos de manera eficaz y mantener el interés de 25 o 36 alumnos en un aula es también muy difícil, incluso en castellano.


3. El aprendizaje de los niños
Saber inglés es entender el inglés oral y ser capaz de hablarlo de manera que te entiendan en Inglaterra. Cuando un hispanoparlante aprende inglés de adulto es difícil (a menudo imposible) adquirir una buena pronunciación. Si los niños aprenden su inglés de ese adulto cuya pronunciación del inglés es defectuosa, no solamente tendrán una mala pronunciación, sino que NO podrán hacerse entender en UK o EEUU, puesto que producirán palabras que no pertenecen a la fonética del inglés.

El inglés no es una lengua fonética a diferencia del español, es decir, su forma escrita no nos sirve para saber cómo se dice. Los niños de hasta 10 años aproximadamente tienen la capacidad innata de aprender lenguas de manera natural, y éste es el maravilloso don natural que los verdaderos colegios bilingües explotan (y por eso es imprescindible que la enseñanza bilingüe comience en infantil); pero éste aprendizaje sólo se produce con la lengua en su expresión oral, el uso del la lengua escrita no sólo es inútil en cuanto al aprovechamiento de esa capacidad innata, sino que puede ser contraproducente al provocar confusión y rechazo en el niño, puesto que existe una disparidad entre lo que oye y lo que lee. Efectivamente, las lenguas escritas son siempre un código artificial, mientras que la lengua oral es natural y el niño tiene la capacidad de aprenderla sin necesidad de estudiar.

La situación en las escuelas primarias adscritas al proyecto bilingüe de la CAM  es que los niños realizan, ya desde 1º, la parte más sustancial de su aprendizaje del inglés con textos escritos como base. Obviamente, los grupos de 25-30 niños no facilitan la comunicación oral, pero además, la falta de seguridad lingüística del maestro/a le aboca al uso del texto escrito como apoyo continuo. Ocurre que a los niños se les pide que aprendan de memoria frases y párrafos enteros, perdiendo la lengua toda su naturalidad y su sentido comunicativo, igual que en otras épocas se aprendían los textos en latín: el inglés se convierte así, para ellos, en una lengua muerta.

Para que los niños tengan un mínimo contacto con el verdadero inglés están las auxiliares del programa bilingüe, lo que en parte viene a reconocer el problema que acabo de describir. Las auxiliares están en el aula al mismo tiempo que la profesora habitual de los niños (en el mejor de los casos durante 3 horas semanales), generalmente en Science: La profesora titular, que imparte la materia y la califica, transmite los contenidos de Ciencias a los niños en un inglés esforzado y la auxiliar hace de vocera, repitiendo los contenidos en un inglés natural. La situación es un tanto absurda y poco eficaz pedagógicamente, puesto que, por un lado, los contenidos de ciencias se pierden en el marasmo lingüístico; y por otro, la eficacia comunicativa que podría tener una clase directa de inglés con el/la nativa, se pierde. En el actual programa el/la nativa no puede impartir docencia sin la presencia del profesor titular, ni calificar, ni corregir ejercicios, ni vigilar el patio……esta completamente desautorizada por el propio sistema y obviamente su posición marginal afecta muy negativamente a su posibilidad de transmitir la lengua a los niños.

En cuanto a la pedagogía y los contenidos del currículo, mientras los niños son muy pequeños, las canciones, los juegos y los cuentos pueden ser muy útiles; pero en Cono de 4º se estudian ya cosas de una cierta complejidad como los estados de la materia, las combustiones, etc., que en castellano se pueden explicar de manera visual, amena y eficaz, pero en inglés se convierte en un verdadero reto para profesores y alumnos y una fuente de estrés. En general, lo que se hace para poder superar el reto es bajar el nivel de los contenidos, con lo que el estudio de los estados de la materia, por seguir con el ejemplo, se reduce en el aula bilingüe a memorizar 8 o 9 frases tipo “ water becomes ice”, “steam becomes water”, frases cuyo contenido olvidarán poco después del examen, y puesto que la atención habrá estado sobre todo focalizada en la lengua y no en los contenidos, el resultado será que no habrán asimilado casi nada sobre los estados de la materia y palabras como solidificación y condensación serán completamente desconocidas para esos niños,bilingües, pero paletos.

La CAM difunde continuamente los buenos resultados de las pruebas externas realizadas por el Trinity College que “garantizan” el nivel alcanzado por los niños en el programa bilingüe, pero lo que no siempre aclara es que estas pruebas son voluntarias y es cada maestro el que decide qué alumnos presentar a la misma. En muchos centros los niños son entrenados intensiva y mecánicamente para el examen durante varias semanas en las que el estrés de niños, maestros y padres llega a cotas absurdas.

La realidad es que para una mayoría de niños la única vía para poder sacar adelante el curso en el programa bilingüe es asistir a clases particulares de inglés. Y la mayoría de los padres acaban financiándolas: Es allí donde los niños realmente aprenden inglés al final. Así, los niños con clases particulares salen adelante, los que no, tienen serias dificultades. Con esta situación se produce la paradoja de que los niños aprenderían la misma cantidad de inglés, y mucho más relajadamente, si, cursando el programa escolar en castellano, asistieran a la misma cantidad de clases particulares. Hay quien ha sugerido que en realidad el programa bilingüe es una maniobra para escindir la escuela pública en dos castas: los que pueden pagar clases particulares y los que no, y así ahondar en nuestro modelo clasista de sociedad.

El  “programa bilingüe” de secundaria es en cierto modo un reconocimiento de la inviabilidad del programa, puesto que es, en realidad, un programa con inglés reforzado y que no afecta a las materias. La continuidad del programa bilingüe de primaria se da en la Sección Bilingüe, y para acceder a ella los niños de 6º deberán de pasar el examen de Trinity. Lo que no se ha aclarado suficientemente es que el nivel exigido a estos niños de 6º es tan solo un B1. El nivel B1 es el primer nivel después del básico y significa que el alumno es capaz de comprender las ideas principales de un discurso cuando éste es claro y normal y trata de asuntos cotidianos, que puede participar en una conversación que trate sobre temas cotidianos, que es capaz de escribir textos sencillos sobre temas conocidos o de interés personal y que puede explicar y justificar brevemente sus opiniones y proyectos.


¿Son estas habilidades comunicativas suficientes para que un alumno de 1º ESO pueda cursar Ciencias o Historia en inglés? Y, a nivel más general, ¿merecía la pena tanta inversión de recursos para alcanzar tan sólo un nivel B1 también llamado “umbral”, lejos de lo clasificado como hablante competente?

Cabe cuestionar muchos otros aspectos sobre la Sección. Principalmente en lo relativo a la capacitación de los profesores como hemos señalado más arriba, teniendo en cuenta que ahora ya los contenidos son de una complejidad considerable y que el diálogo con adolescentes es inviable sin un verdadero C1 oral como mínimo. Puesto que, como hemos visto, es poco probable que ni profesores ni alumnos tengan un nivel C1 en la ESO,  habría que preguntarse: ¿Hasta dónde tendrán que bajar el nivel de los contenidos para poder hacerlo en inglés (alumnos y profesores)? , ¿Considera la Consejería de Educación que la Biología (en un medio natural en peligro), la Geología, la Geografía y la Historia de nuestros antepasados y de las civilizaciones (en un mundo cuyo rumbo es incierto) son materias “de segunda” que pueden devaluarse sacrificándolas al conocimiento del inglés? ¿Cuál es la idea de una persona formada para la Consejería?, ¿Basta con saber Matemáticas (para ser buenos contables) y no hacer faltas de ortografía? ¿Podrán pasar una selectividad tal y como la conocemos los niños de la Escuela Bilingüe?, ¿O habrá que hacer una selectividad especial rebajada en Ciencias e Historia para los niños de la Sección?, ¿El nivel universitario español será equiparable al de los países europeos desarrollados? ¿Serán capaces de alcanzar niveles de excelencia en la Universidad con las carencias de formación que arrastrarán?

Si queremos una educación de calidad y que nuestros niños hijos e hijas aprendan inglés de verdad, quizá fuera viable un sistema con inglés reforzado. Para asegurar una eficiencia pedagógica y optimizar recursos, sería fundamental introducir el inglés en Infantil, maximizando en esa etapa el contacto con un inglés natural (nativos, audiovisuales, etc.), para pasar a una Primaria en la que se impartieran unas clases de inglés de calidad, fundamentalmente de inglés oral y con pedagogía comunicativa, quizá usando temas que se estén tratando en “Cono”, pero sin necesidad de atropellar ésta ni otras materias y quizás ampliando el horario de inglés con la eliminación de religión. A partir de 5º o 6º, la gramática y la lengua escrita podrían comenzar a ser una parte sustancial de las clases de inglés. Los/las profesoras de inglés debieran de, además de tener la titulación correspondiente, pasar un riguroso examen con un control externo de prestigio, en el que se evaluara su nivel de expresión oral, para garantizar que la persona habilitada sea un verdadero C1 en cuanto a naturalidad y fluidez oral, y que además tenga una pronunciación lo suficientemente correcta para poder transmitir a los niños una fonética inglesa.


4. Una mirada al pasado, presente y futuro
El programa bilingüe de la CAM parece estar en la línea de otros grandes proyectos especulativos a los que nuestro país se ha visto sometido en los últimos años: oferta servicios que no puede cumplir, y por lo tanto, estafa. El programa especula con el tiempo y el esfuerzo de nuestros hijos y con sus oportunidades de futuro e invierte recursos del estado en una formación a los profesores a todas luces inútil por insuficiente para impartir clases, aunque sí les sea útil a ellos a título personal.

España ha producido dos generaciones de personas educadas (muchas actualmente en el paro). Algunas completaron estudios o se abrieron camino en otros países (sin haber estudiado en cole bilingüe) gracias a su buena formación en sus disciplinas. El inglés, muchos, lo aprendieron después de los 18.

Lo que todos debemos comprender es que el inglés es un accesorio, necesario para moverse en un contexto internacional, pero complementario de la formación de una persona. El inglés, como todas las lenguas, es un vehículo del conocimiento pero no es conocimiento en síSi tenemos el complemento, pero falta la sustancia no hay persona formada….Si nos falta la formación para investigar, crear y pensar, el buen inglés de nuestros hijos les servirá para poder hablar a los turistas en su trabajo de fijo discontinuo en la costa. Claro que hay gente que puede pagar verdaderos colegios bilingües, y claro que a todos nos gustaría que nuestros hijos hablen buen inglés. Pero nos engañan si nos hacen creer que en España sea posible ofrecer una verdadera educación bilingüe pública para todos. Es imposible, y mucho menos en época de recortes, Pero SI es posible y hemos tenido buenos ejemplos, ofrecer una educación publica de calidad universal si el estado se lo plantea con seriedad y como una herramienta de redistribución e igualdad.

Un país nunca va a ser más culto ni más prospero si empieza por descuidar su propia lengua, su cultura y la formación de su juventud a favor de otra lengua supuestamente más importante –tanto como para trastocar y poner en riesgo la calidad de la educación de un país–. El programa bilingüe nace de un sempiterno complejo de inferioridad español respecto a Europa, y quizá no falten razones, pero el camino de superación nunca podrá partir de pretender ser lo que no somos, y somos un país con una lengua romance, no somos anglosajones ni germánicos, y habrá que partir de esa base real y construir a partir de ahí.

Una ciudadana, mayo 2012

34 comentarios:

MTP dijo...

Me ha gustado tu artículo, lo encuentro muy interesante y más aún sabiendo que quien lo escribe conoce la materia. Sin embargo, si te puedo hacer una crítica, pienso que podría tener mucha más difusión si lo recortaras, pues se hace largo. Un saludo,

recuperar madrid dijo...

El artículo está cogido tal cual de un post en el blog del ampa La Latina, además de correr por correo-e. Si la autora lo lee que lo tome como una sugerencia. Gracias de todos modos

eduideas dijo...

Pues pienso que se necesita esta extensión para transmitir claramente el mensaje, lo difundiré

Roberto dijo...

Soy hablante de inglés con nivel C1 certificado y coincido al 100% con la opinión de la autora basándome tanto en mis conocimientos como en mis experiencias como estudiante de inglés y como antiguo usuario profesional del inglés en España, Reino Unido y Francia.

Sin embargo me gustaría hacer una crítica constructiva ya que la autora habla al final del texto acerca del descuido de la propia lengua: suponiendo siempre que se haya hecho un "copiar y pegar" del texto original, querría hacerle notar que el uso que hace de las comas durante todo el texto es incorrecto y contrario a las normas de nuestra lengua, dificultando mucho la comprensión en una sola lectura y forzando la relectura de numerosos párrafos para poder comprenderlos con el sentido correcto.

George Castle dijo...

es realmente absurdo, dedicar tantas horas de estudio a un idioma tan complicado y difícil de aprender, cuando existe una alternativa muchísimo mas fácil para un idioma verdaderamente universal, democrático e incluyente, aprender y fomentar el ingles es fomentar el dominio lingüístico que tienen las naciones anglosajonas sobre el resto del mundo, un imperialismo lingüístico que se traduce en una ventaja inconmensurable para los nativos ingleses y una fuente de grandes frustraciones y sentimientos de inferioridad para los que no lo son, comencemos a cambiar el mundo y comencemos a crear opinión, exijamos a nuestros políticos incluir idiomas verdaderamente universales como el esperanto o el interlingua y desliguemonos del ingles, ahora mas que nunca con las nuevas tecnologías y la globalización, esto es mas posible que nunca, ahora es el momento.

Guille dijo...

Estoy en desacuerdo. Un adulto sí que puede aprender inglés. Y un alumno interesado también puede aprenderlo en la escuela pública, siempre y cuando el maestro no sea un completo ignorante, no hay necesidad de pagar clases particulares porque los libros y audio son guías bastante buenas.

isjomajo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, sobre todo en la parte en donde afirmas la importancia del aprendizaje oral de una lengua, cuando somos niños. En mi escuela se impartía inglés desde los tres años,e incluso con profesores nativos, pero debido al empecinamiento de dar gramática antes de aprender el idioma, para nada me sentí más preparado que los chicos de otros colegios al entrar en el instituto. Considero, como bien dices, que primero hay que aprender la lengua y después la gramática. No sirve de nada que sepa escribir un idioma si no lo se hablar. Gracias por tu artículo y expresar lo que otras muchas personas pensamos.

isjomajo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, sobre todo en la parte en donde afirmas la importancia del aprendizaje oral de una lengua, cuando somos niños. En mi escuela se impartía inglés desde los tres años,e incluso con profesores nativos, pero debido al empecinamiento de dar gramática antes de aprender el idioma, para nada me sentí más preparado que los chicos de otros colegios al entrar en el instituto. Considero, como bien dices, que primero hay que aprender la lengua y después la gramática. No sirve de nada que sepa escribir un idioma si no lo se hablar. Gracias por tu artículo y expresar lo que otras muchas personas pensamos.

Ruth dijo...

Me ha gustado mucho leer tu artículo. Ya era hora de que, aunque en una carta abierta, alguien se dirigiera al Ministro de Educación explicando la verdadera situación de los programas bilingües.

Los niños efectivamente necesitarían a un nativo en clase, o a alguien con una competencia muy cercana y como bien dices en España hay muy poca gente.

Soy Filóloga por vocación, adoro las lenguas y por encima de todas ellas el Inglés; entre mis 11 y 13 años viví en UK, me acerco al bilingüismo, pero nunca diré que lo soy si hablo con una persona que conoce el tema. Ninguno de mis dos progenitores es nativo, ni he vivido 10 años fuera, y es casi lo que yo requiero para llamar a alguien bilingüe. He de decir que mi competencia oral es altísima, y así lo corroboran mis antiguas compañeras del colegio de esos años con las que sigo tratando.

Durante el curso escolar 2008-2009 estuve preparando a 5 maestros de primaria de un colegio concertado de Madrid capital para la habilitación. Aprobaron y la obtuvieron 3 de ellos. Demasiados me parecen a mí. Sí, es un excelente resultado para mi trabajo, pero no es real. Los he tenido en clase, sé cómo hablan, como se comunican y qué problemas tenían, y no estaban preparados.

Conozco a una familia cuya hija estudia en uno de estos colegios, Science es un verdadero problema en esa casa pues la profesora 1) no habla bien Inglés, la niña lo nota 2) les lee el libro sin más, la madre tiene que ayudarla para que adquiera los conocimientos necesarios (lo comentabas en tu artículo, pierden conocimientos con este sistema). Pero la madre no habla Inglés, sino Francés, y necesita el libro en español. Resultado: la niña da Science en clase en un pseudo-inglés y en casa en castellano. Desastroso.

Clarion dijo...

No sé si el caso de Madrid es el mismo que en otras cosas comunidades pero en los mal llamados "institutos bilingües" de otras comunidades, sólo hay una clase por nivel en el que se imparte la modalidad bilingüe. Ello provoca un buen clima en esas clases con lo que, en principio, se podría mantener el nivel del resto de enseñanzas (pues no toda la clase se hace en el idioma extranjero) pero que provoca, al ir todos los alumnos de buen comportamiento y calificaciones, una degradación importante en el resto de los grupos que se ven limitados en sus posibles aspiraciones. Otra perversión más.

Llevo años señalando el error y el problema por la razón anteriormente expuesta además de lo indicado por la autora de la carta. Por suerte, somos más en el mismo barco.

Anónimo dijo...

Soy profesora de español como lengua extranjera y tengo buenos conocimientos de inglés (C1, como se dice en la carta). Estoy de acuerdo en la mayor parte de cosas que se dicen (quizá en algún detalle discrepe, pero es secundario). Me parecen interesantes las argumentaciones que presenta la autora, sin embargo, lamentablemente, me temo que para esos políticos que diseñan los planes de estudios y no tienen ni idea de cómo se enseña o se aprende una lengua extranjera o segunda lengua este artículo les va a servir de poco. El analfabetismo de este país empieza en su casta política, ¿cómo podemos pretender entonces que ellos mejoren nada en tema de educación?

Abraham dijo...

Articulo muy interesante solo te pondría un humilde pero... Veo que sigues la ABSURDA corriente, no lo digo yo lo dice la REAL ACADEMIA DE LA LENGUA ESPAÑOLA, de usar por ejemplo maestro/a o el/la nativa.
Ya lo ha indicado la RAE y no me casaré de decirlo. NO es necesaria esa diferenciación de sexos dado que por ejemplo los niños engloba ambos sexos, los profesores engloba ambos sexos. Se llega al esperpento de poner Los/las profesoras.

Por favor entiendo tu defensa a ultranza del ingles y no me entiendas mal, yo hago la misma defensa del ingles. Tu artículo me parece de lo más acertado que he leido en este tema y debería ser de obliga lectura. Pero es que me chirría la vista y la mente al leer según que expresiones.

NO MÁS LOS/LAS POR FAVOR, desterremos estos NUEVOS malos hábitos.

Anónimo dijo...

Soy profesora de Educación Primaria. lo primero darte las gracias por decirlo tan claro y tan argumentado. En Madrid uno de mis sobrinos cursa 5º de E.P. en un colegio público y bilingüe desde infantil. Siete años de educación bilingüe han obtenido como resultado que el crío aborrezca el inglés,que se muestre muy reacio a seguir cursando sus estudios de la ESO en un instituto similar y que su madre se haya convertido en una experta en Conocimiento del Medio, ya que debe explicarle en casa, en español, la materia y luego él una vez que la ha comprendido se la estudia en inglés. ¿Ningun lumbrera de la Comunidad de Madrid se ha dado cuenta que se necesita cualificación en Conocimiento delMedio para imparatirlo no solo competentemente sino también de forma motivadora? Señora Esperanza Aguirre ser competente en inglés no conlleva mágicamente ser competente en el resto de materias. Así que muchos profesores optan por no explicar una materia por que NO les es posible hacerlo ya que carecen de la formación necesaria en detrimento de esa materia.

Anónimo dijo...

Esta muy bien explicado, como realmente nos estan timando con la clase de inglés. Yo ya lo noto cuando hago los deberes con mis hijos. El inglés no sirve para nada. Al final solo queda apuntarlos a clases particulares. Es decir, se vuelve a la individualidad y demuestra que uno de los factores de fracaso está en la "masificación" de las clases. Casí sería mejor que nos dieran un "bono" y los llevaramos a dar idioma como actividad extraescolar en vez de llenar los colegios de una clase que no sirve para nada. Además se suponen que deben salir al acabar el insituto con qué, ¿un b1? y cuando salen del insti, tienen que ir a la escuela de idiomas para sacarse un titulo ¿qué clase de timada es esta? Y luego esta el otro lado, que realmente si saben decir "Hello" y saber lo que significa es un milagro. Y claro los que encima tienen el valenciano o catalán como otro idioma ya se les marea demasiado (yo me pongo en la piel de los crios y es que me entra un...). Tantos recursos y tanto tiempo y no sirve para nada. Pués nada así van los crios cada día más asignaturas y cada día más tontos. Mientras no se cambie el sistema que esta claro que no funciona, no se hará nada. En otros países si funciona lo del bilingüismo, no sé si por la gramática o lo que sea, pero aquí según los resultados que dicen que hay con el inglés la cosa no funciona. Todo esto no pasaría si todos hablaramos catalán :P

Lauren Aloise dijo...

Finalmente un español dice todo lo que nosotros, americanos y ingleses enseñando inglés aquí, hemos estado diciendo desde hace mucho tiempo.

Yo he trabajado en Andalucía y en Madrid como auxiliar de conversación de inglés. Os digo, mi trabajo no valía para nada-- y de hecho era deprimente. Cuando estás dando clase con profesores incompetentes-- algunos enseñando la gramática totalmente equivocada-- te preguntas porque has venido desde tan lejos. En varias ocasiones corregí a un profesor solo para que me respondan que su pronunciación era británica (soy americana, pero sé cuando algo es británico y cuando está equivocado) o que prefieren enseñar algo MAL (os juro que varias personas me dijeron eso) porque los niños lo entienden mejor. Como gente que nunca han salido del país para vivir en el extranjero, no entiendo como en vez de escuchar mis criticas educadas y bien explicadas, preferían estar a la defensiva y seguir enseñando las cosas mal.

Aparte de la mala calidad de muchos profesores, también he visto que el auxiliar no tiene un trabajo bien definido, y que los 1,000 euro al mes que cobran aquí en Madrid realmente están siendo malgastados. Es duro aceptar la realidad, pero este programa no está funcionando, y yo me siento que gasté dos años de mi vida (profesionalmente hablando) haciendo algo inútil. Qué pena, no?

Anónimo dijo...

Desde Andalucía: Pues el texto muy bueno. Esto del "bilingüismo"(y otras cosas, como, por ejemplo,la magia de la "cultura de la evaluaciónn") es como el cuento del traje del emperador, todo el mundo sabe que es mentira, pero nadie se atreve a decirlo

Anónimo dijo...

Yo soy auxiliar de conversacion en un colegio bilngue y coincido con la opinion de la autora. Los dos grandes problemas de los programas bilingues son el nivel insuficiente de los profes y las clases de Science (o Cono) y como no se usan bien los auxiliares.
En mi colegio hay 3 profes de ingles....uno con buen nivel pero con problemas de pronuncacion, otro con buena pronuncacion pero hace bastantes errores de gramatica o la ultima que, en mi opinion, no debe impartir clases de ingles en ningun caso.
En el tema de science estoy completamente de acuerdo con la autora. Los ninos no entienden NADA solo memorizan. Esto no sirve nada. No se como solucionarlo, quizas deben impartir Cono en ingles a partir de quinto o sexto pero ya a esa edad deben aprender cosas mas complejas de lo que les permite su nivel.
El ultimo gran problema es que los auxiliares se usan para preparar los examenes de Trinity o Cambridge. Este ano mi funcion ha sido sacar 2 ninos de clase y preguntarles preguntas de listas mientras el profe sigue en clase sin ser corregido cuando pronuncia mal o comete una falta de gramatica.
Podria escribir una novela sobre este tema...pero os dejo con mi opinion en general del programa bilingue. En teoria es una buena idea pero como se esta implementando actualmente no funciona como debe.

(Perdon por las faltas de gramatica u ortografia)

Anónimo dijo...

Aunque esté de acuerdo en que la "enseñanza bilingüe " no se está orientando de una manera racional, estoy en desacuerdo con la importancia de que el profesor sea nativo. El problema en España es que si no eres nativo no eres quién para enseñar una lengua, aunque tengas todos los títulos por haber y años de estancia en el extranjero.
Conozco casos de extranjeras (que hablan un buen inglés) y trabajan sin estudios en academias y las hacen pasar como "nativas" cuando son belgas, rusas...Por otro lado, no entiendo esa fijación con el inglés británico cuando el que se está imponiendo es el estadounidense.
Lo que quiero señalar es que después de mas de ocho años viviendo en USA, con una licenciatura de traducción y chiquicientos mil cursos relacionados (también tengo el título de formador de formadores) llevo años comiendo mierda: por que no soy nativa, por que los niños están cada día mas mal educados y no me extraña cuando las madres (que no tienen ni idea de didáctica ni de nada) te quitan la autoridad delante de sus hijos y te arreglan el cuello de la camisa cuando no le pasa nada.
Yo creo que somos tan ignorantes como para aconsejar a quienes quieran saber idiomas que nunca hagan filología inglesa o traductores, por que llegará una guiri de Ucrania y no tendrán nada que hacer.
Estudiar idiomas es importante para tu vida pero no estudies filología o traductores pues llegará una guiri y te quitará el trabajo aunque no tenga ni idea de didáctica.

Adolfo dijo...

¡Por fin! Alguien que se atreve a decir la verdad acerca de la estafa del "bilingüismo". Abundando en la perfecta argumentación de nuestra compañera, me permito llamar la atención sobre un par de cosas: 1º) que el sistema implantado en la Comunidad de Madrid no solo es segregador y clasista porque fomenta la necesidad de recurrir a clases particulares que solo unos pocos pueden pagar; es segregador porque deja en las aulas "no bilingües" a los alumnos/as con más dificultades, alumnos/as que pierden la referencia de compañeros/as más competentes: en resumen,fomenta la segregación en grupos de "buenos" y "malos" alumnos (y "buenos" y "malos" centros de enseñanza), dinamitando los principios educativos de integración y atención a la diversidad. Si se quiere que nuestros chicos y chicas adquieran competencia en inglés y otras lenguas, deberían fomentarse los recursos ya explicitados en nuestra legislación educativa: desdobles, auxiliares de conversación, intercambios, más horas de lengua extranjera, etc., para conseguir con ello favorecer a todos, no sólo a unos pocos. Y 2º) Me parece genial que una ciudadana y madre o un profe de Sociales de secundaria como yo expongamos nuestras ideas, pero ¿dónde está el debate social acerca de un asunto tan relevante como este del "bilingüismo"? ¿Por qué no nos llegan las voces de los expertos, de las personas que supuestamente se dedican a reflexionar sobre estos temas? ¿Dónde están nuestras "elites" intelectuales, nuestros profesores de universidad, nuestros periodistas especializados, nuestros políticos responsables? ¡Menudo país!

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo. Soy profesora de inglés en un centro público de Educación Secundaria clasificado como "bilingüe" y pienso lo mismo. Creo que hay otros aspectos que deben fomentarse más como el conocimiento de nuestra lengua, valores, voluntariado... Por supuesto, la lengua inglesa es muy importante pero el programa bilingüe no soluciona los problemas que encontramos en un aula. Quiero añadir que el empezar con la enseñaza del inglés a los 3 años tampoco favorece la competencia lingüística de una persona.

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo. Soy profesora de inglés en un centro público de Educación Secundaria clasificado como "bilingüe" y pienso lo mismo. Creo que hay otros aspectos que deben fomentarse más como el conocimiento de nuestra lengua, valores, voluntariado... Por supuesto, la lengua inglesa es muy importante pero el programa bilingüe no soluciona los problemas que encontramos en un aula. Quiero añadir que el empezar con la enseñaza del inglés a los 3 años tampoco favorece la competencia lingüística de una persona.

Anónimo dijo...

Soy profesora, y he estado durante 4 años trabajando en un colegio bilingüe, y estoy completamente de acuerdo con este artículo. Creo además que un centro bilingüe es una bomba de relojería para niños con dificultades, directamente se les echa del sistema...aunque a lo mejor es lo que busca esta Consejería y el Ministerio, crear dos clases de centros públicos...Divide y vencerás ¿no?

Rocío González del Piñal Martín dijo...

Estoy de acuerdo con muchos aspectos de los que se hablan en la carta, al tiempo que discrepo en otros.
Al mismo tiempo, me alineo con las críticas constructivas que le hacen a la misma sobre falta de corrección en los signos de puntuación y del uso, incómodo, de el/la, los/las, pues ya la Real Academia de la Lengua contempla que el uso de “los niños” alude a todo el colectivo. Una profesora de la universidad indicaba, ya hace diez años cuando se empezó a usa el término de “violencia de género”, que el género de las palabras no indican el sexo. Esto poniéndonos un poco exigente con el uso del lenguaje.
A mi parecer, el que entremos a debatir un tema de acepción lingüística, no erradica la cuestión puesta sobre la mesa. Por mi experiencia, las personas que conozco bilingües son, principalmente, porque cada uno de sus padres habla un idioma diferente, además de ir a centros que lo refuercen y visitar ambos países habitualmente. Ni si quiera, alumnado que está matriculado en colegios privados carísimos en los que casi la totalidad del profesorado es nativo, consiguen ser bilingües. A veces reflexiono y pienso en quiénes somos realmente bilingües, ciñéndonos al significado estricto de la palabra “Que habla dos lenguas”, no se especificándose en el cuánto. Hay muchísimos tecnicismos y palabras que muchos de nosotros desconocemos, por lo que podríamos hablar amplio y tendido sobre denominación “bilingüe”.
Pensad, por ejemplo en la pronunciación de Fernando Alonso y Guardiola. En cambio, son comunicadores a nivel mundial y se hacen comprender bastante bien. Poned en Google cómo gente conocida de otros países pronuncia y habla español o castellano. Conoceréis al escritor Ian Gibson y al comentarista de fútbol Michael Robinson, su mejora en el habla se debe a su largo tiempo de residencia en España. Está claro que ningún gobierno puede dar cobertura para que el alumnado sea completamente bilingüe; quiero pensar que han utilizado el término porque así el mismo lo permite y por acortar.
Son muchos los estudios que avalan fluency vs accuracy en el ámbito de adquisición de un segundo idioma.
Soy maestra y coordinadora del Programa Bilingüe en un Colegio de Infantil y Primaria de Comunidades de Aprendizaje en un pueblo de Sevilla.
Personalmente la idea del programa de modalidad bilingüe me parece bien. Lo que podríamos discutir es en de qué forma se pone en práctica en cada centro y cómo nuestros superiores dejan de supervisar su implementación en las aulas.
Totalmente de acuerdo en que el nivel del profesorado, en casos, es deficiente, pero no más lejos de la realidad de un docente que no hace bien llegar los conocimientos a su alumnado, por ejemplo, en la materia de matemáticas. Conozco a gente bastante docta en idioma inglés que le cuesta bastante impartir docencia, utilizar la pedagogía. Por lo que, como podréis deducir, la cuestión es un tanto más profunda. En ambos casos fueron afortunados, pues el sistema deja que pongan a prueba si son o no buenos docentes, aunque apenas posean formación en psicología del desarrollo, psicología infantil o pedagogía, y pasen la prueba de oposición satisfactoriamente. A ratos olvidamos que estamos ante personitas que, en la mayoría de los casos, no han dejado de ser niños. A ratos, olvidamos que las clases magistrales es para un determinado público. Esto bien lo saben los profesores de universidad. Si no, mirad, pongo un ejemplo:

Maria del Carmen Sotillo dijo...

¡Hola, ciudadana!
Quiero decirte que no estoy en absoluto de acuerdo con tu opinión:
1) La CAM define programa bilingüe aquel en el que se imparte un tercio en lengua inglesa.
2) La habilitción de los profesores si está reconocido por instituciones externas. Te recomiendo que te leas los anexos de la última orden de RRHH.
3) Estoy harto de que tú y otra gente echen la culpa de la educación al profesorado funcionario de los centros de la comunidad de Madrid. ¿Por qué no pruebas la privada?
En tu carta se te ha olvidado algo más: tu nombre.

Anónimo dijo...

Yo soy auxiliar de conversación en un instituto en la Comunidad. Trabajo con niños de primero hasta cuarto de la ESO. Y entiendo perfectamente lo que usted dice, y estoy totalmente de acuerdo. Me ha sorprendido ver la situación en los institutos, o la manera en que llamamos "bilingual" a los mismos niños que apenas pueden decir una frase entera en inglés. Me da pena decir eso, pero creo que la Comunidad está invertiendo los recursos de manera poco responsable, también con respeto a los 1000+ auxiliares contratado. No podemos hacer mucho, la verdad -- no se puede corregir la mala pronunciación de una profe en frente de los niños, por ejemplo, y muchas veces nos hacen explicar la gramatica cuando sería mucho más útil que los alumnos nos escuchen hablar en nuestros accentos nativos. Me gustaría hablar con alguien que nos eschuaría de verdad, porque conozco a muchos, muchos auxiliares que tienen la misma opinión, pero el ambiente no es bastante abierto para contar nuestras verdaderas observaciones. Quería quedarme otro año en Europa, trabajando en una escuela, pero la situación me ha frustrado mucho.

Al final -- sí, hay una diferencia enorme entre los que pueden pagar para clases particulares, y los que no pueden.

Juan T Garcia dijo...

De acuerdo al 100%.
Si sirven las experiencias de inmersión bilingüe en CCAA con lengua co-oficial, aún en entornos mayoritariamente castallanoparlantes como Alicante capital y alrededores, los niños recién llegados en educación infantil asimilan más rápido la fonética y los rasgos propios del valenciano que sus hermanos/as que se integran ya en primaria o secundaria.
Aclimatar a los niños más pequeños en entornos controlados, donde la repetición de los mensajes es continua (instrucciones en educación física, plástica o música, por ejemplo) les hace asociar ese entorno a una situación de comunicación real donde no "aprenden" el idioma, sino que lo usan desde el principio.
Sobre la formación de los profesores y profesoras, también estoy de acuerdo en que el nivel ideal es como mínimo el de C1, y lo que seguro que no es ideal es la forma en que describe el proceso de habilitación en la CAM, que creo que comparte muchos de los errores con el que se está llevando a cabo en la C.Valenciana. Se llama Titulitis, y consiste en confundir aprobar un examen con saber conducir, y es igual de peligroso porque el conductor novel que se cree Fitipaldi es un peligro para la vida de los peatones y el profesor que se crea automáticamente capacitado para desenvolverse en inglés en un aula por tener un papelito firmado es un peligro para los niños cuya formación tiene a su cargo.
Creo que será más fácil despertar el interés de los padres en que hagan un seguimiento de este tema, y apelar a la profesionalidad de los docentes, porque quienes diseñan estas políticas de propaganda desde despachos alejados de las aulas saben demasiado bien lo que están haciendo como para cambiar de rumbo. Les viene de fábula para seguir desprestigiando a la escuela pública.

Anónimo dijo...

Enseñar en una lengua extranjera sin que todo el profesorado lo sea también es intentar la cuadratura del círculo o querer que los ríos corran al revés. Como dijo Zamenhof, creador del Esperanto, "para que una lengua sea internacional no basta con designarla como tal". Es en situaciones kafkianas como la educación "bilingüe" en Madrid donde mejor se ven los límites prácticos en el uso de una lengua nacional como si fuera internacional. ¿Quién es el utópico aquí, pues?

Anónimo dijo...

Soy profesora de inglés en un colegio público bilingüe de ma Comunidad de Madrid. Después de estudiar Magisterio me licencié en Psicología por la Universidad de Londres. En esa ciudad viví 5 años. Logicamente, tengo un nivel C2 (Proficiency). Hago estas aclaraaciones porque me gustaría dar la impresión a los lectores de que también sé de lo que hablo cuando digo que no podría estar más de acuerdo con todos cada uno de los puntos de este artículo. El programa bilibgüe de la CAM es una farsa propagandística que perjudica a los alumnos y al profesorado, por muy capacitados que estemos algunos para afrontar el reto de dar clases en inglés. En ocasiones el dominio del inglés del alumnado es tan diverso que nos vemos obligados a explicar contenidos de Science en español. En mi centro, en 6º de primaria la mitad de la clase es incapaz de seguir la clase de Conocimiento del Medio en inglés, por lo que la profesora se ve obligada a dar "dos clases en una", lo que perjudica a unos y a otros. Espero honestamente que el delirio bilingüe de la comunidad madrileña NO se extienda al resto de España de ninguna de las maneras.

Anónimo dijo...

I´m a Auxiliar in a "Bilingual" High School in Madrid. I can attest to the fact that students often hear bad grammar from the teachers, and later as I give them their oral exams, they make the same mistakes and I take off points for those mistakes. Many of the students speak an impressive version of "Spanglish" at my school, where words that they don´t know are simply substituted for "made-up" words: "gominolas" are "gumilations" and "mentiras" are "mentirations". Syntax is a huge problem and many bilingual teachers have problems forming questions in English which results in the following: "Have you a doubt?" (Tienes alguna duda) Instead of "Does anyone have any questions?". These mistakes may not sound like much and I am sure that students nowadays have a much higher level than their parents did, but passing this system off as bilingual is a disservice to the students as they receive a watered down curriculum in both Science and History thanks to publishers like Anaya. Like someone mentioned, many teachers simply read from the book and the stupidest concept is imparting Citizenship or Technology to "Programa" students who are already failing their A2 level English class.

I teach private lessons and the progress that adults students can make in the language is real. I agree with this article. Billions of dollars are spent on a program which takes students from A1 to B2 in the course of 7 years. In a private lesson setting, I believe you can advance a level a year with the right teacher and due dilingence.

Anónimo dijo...

No estoy en absoluto de acuerdo con su idea de que para ser buen profesor en un programa bilingüe hay que ser nativo. La auxiliar de conversación que tengo en mi aula apenas sabe cómo tratar a los niños, no consigue atraer su atención, es muy poco dinámica y los niños terminan por perder la atención. Es imprescindible que el docente se preocupe por tener un muy alto nivel de inglés, pero es más importante que sepa transmitir y hacer los contenidos interesantes y cercanos a los niños. Yo así lo hago y el programa está funcionando muy bien en mi centro de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.

Anónimo dijo...

LLevo años en I.E.S. bilingue y aunque todo lo manifestado es verdad lo mas importante es la gran segrugación que provoca entre el alumnado, pero tambien la gran mediocridad en los contenidos en detrimento del Inglés, si bien es cierto que los grupos al proceder de intereses comunes son buenos alumnos y trabajadores, los contenidos impartidos en Inglés sufren una gran merma en favor del conocimiento del Inglés. Por cierto alguien puede pensar el porque de esta fiebre? por que no es gratuita. Tambien señalar que este curso escolar auxiliares de coversación cotratados por su conocimiento del idioma han estado impartiendo clases en E.S:O. tanto en Geografía e Historia y Ciencias Naturales por un modico sueldo 1000€ brutos pero su convocatoria en su pais de origen solo le exige el conocimiento del idioma y una titulación (pueden ser licenciados de cualquier cosa) amen de un cursillo de seis meses leanse las convocatorias en paises de origen. Por cierto alguien aguantaria una educación basada en la Educación física, donde esta área fuera el eje globalizador y todo funcionara en función del Ejercicio físico. tortuoso no? pues lo mismo. Estamos permitiendo desde ya hace muchos años que un monton de advenedizos rodeados de "asesores" (comprueben cuantos tiene la Sra Consejera de la C.A.M y de donde son y que orientaciones políticas tienen) destrocen nuestra cultura esa que tan ilustres escritores y pensadores nos ha dado. En Fin

Anónimo dijo...

Tradicionalmente, la enseñanza del idioma inglés en nuestro país es muy deficiente,tanto en primaria como en secundaria, a pesar de los licenciados y licenciadas con años de experiencia en la docencia. Así pues, agradezco "el copia y pega" sin comillas, pero no parece que hayamos avanzado con programas "bilingües" o no.
Gracias por tanto esfuerzo en argumentaciones, pero tampoco ha mejorado la enseñanza ni el aprendizaje (dos procesos distintos y complementarios , cómo se evalúa el de la enseñanza, por cierto, es un misterio a parte de las propuestas de mejora que ni el Inspector se lee.
Cuánta hipocresía y manipulación en nombre de los alumnos. La formación del profesorado es un tema pendiente en España, no solo la de la habilitación de idiomas. Si reivindicamos algo, empecemos por los que "reparten" contenidos en el aula como si fuera cualquier cosa para evaluar que se repitan en los exámenes y penalizar los fallos en vez de premiar los aciertos.
Empecemos por no abanderar expresiones como la inclusión y no practicarla en las aulas. Continuemos revisando métodos pedagógicos de hace más de 50 años, el propio boletín de notas es impropio de una sociedad de las nuevas tecnologías y la información, registrando únicamente las notas y las ausencias (siento vergüenza ajena).
Luego hay que recordar a todos aquellos docentes de centros públicos "que huyen" de los grupos menos favorecidos, y protestan porque ese curso les ha "tocado" este grupo o ser tutor. Por cierto, a veces no se pueden ni comunicar entre ellos porque se niegan a facilitarse el correo electrónico y tienen que andar a la "caza y captura " para recopilar información que ofrecer a las familias sobre el desarrollo de las aulas y los alumnos.
Es penoso soportar tanta manipulación.
La enseñanza necesita una renovación urgente e innovación.
Estoy totalmente en contra de la LOMCE, por si las acusaciones se suceden a continuación.
Penoso lo poco que hacemos por cambiar algunas cosas que solo dependen de nosotros y no requieren recursos externos.
Esta especie de "resignación" popular afecta, lamentablemente, a todos los estamentos de la comuidad educativa. Por el contrario, siempre existen y existirán personas dentro del mundo educativo contra corriente, es decir, contra la corriente de la administración y contra la corriente del inmovilismo y la cerrazón. Estas son las que ponen en marcha iniciativas exitosas para todos, a pesar de los
rechazos y los obstáculos de unos (admon. y de otros , el resto).

Anónimo dijo...

El bilinguismo es otra burbuja. Y algún día explotará. Los padres huirán de matricular a sus hijos en institutos bilingues.

El Ballet de las Palabras dijo...

No voy a entrar en los problemas gramaticales que tiene el texto (que son muchos y perjudican a nuestro propio idioma). En general pienso lo mismo que la autora sobre este bilingüismo que es sólo medio propagandístico de un partido, espejismo para engañar al ciudadano que no analiza mientras se perjudica a unas generaciones que se desarrollan de manera deficiente. Estos alumnos nunca llegarán al nivel aceptable de evolución de su cerebro, pues durante toda su infancia se han estado saltando los pasos a favor de un idioma que se puede aprender de mil mejores maneras. Lo que no se acerca a la realidad es la afirmación categórica de que el profesorado de Secundaria (los maestros han tenido otras circunstancias)presentan un nivel C1, que es lo que se le exige. Otra cosa es lo que se pueda hacer con un alumnado que muy bilingüe, pero que no sabe realmente inglés y, peor, no tiene los conocimientos propios que debería presentar a su edad. He trabajado en institutos bilingües -en otra asignatura- y he sido testigo de las consecuencias que tiene ese mal llamado bilingüismo: la segregación, el alejamiento de la realidad (los alumnos bilinües se consideran mucho mejor de lo que sus conocimientos presentan), la bajada de nivel de contenidos, las presiones de la Administración (incluso de padres), las carencias en la propia lengua y un largo etc. que me hace incomprensible que los padres quieran esto para sus hijos. Mucho más fácil sería hacer como en otros países: poner las películas y series subtituladas y sin doblar. Así dejaríamos en paz todos los demás conocimientos que necesita un alumno para formarse adecuadamente tanto mental como moralmente.