En septiembre de 2009 Eurydice publicó un informe titulado National Testing of Pupils in Europe: Objectives, Organisation and Use of Results" en el que analizaba cómo, cuándo y para qué evalúan los diferentes países a sus alumnos. Aunque nueve meses después no contamos con una traducción al castellano, algo que resta utilidad a este post, su conocimiento es imprescindible ante la utilización un tanto perversa o desorientada de estas pruebas tanto por comunidades autónomas como por el gobierno central.
Interesante el cuadro resumen de la página 27 sobre las edades y los tipos de prueba que se aplican en los diferentes países (siempre interesante la aportación de Finlandia cuyo resumen en la página 98 es modélica).
También el análisis sobre la publicidad de los resultados (p.55) y los efectos no intencionados (o si, como en Madrid).
En la gran mayoría de los países europeos no se publican los resultados agregados de las pruebas nacionales sobre cada escuela. En algunos países, los documentos oficiales establecen claramente que las pruebas nacionales no se pueden utilizar para clasificar las escuelas. Esto se aplica en Bélgica (Comunidad francesa), Francia en el caso de las evaluaciones-bilans (evaluación sumativa), Luxemburgo, Austria y Eslovenia. En Finlandia, hubo una fuerte presión de los medios de comunicación para que se publicara el ranking de las escuelas, pero el consenso nacional en el debate posterior fue contrario a la difusión de resultados de las pruebas.El apartado 3.5. Surveys and debates
Algunos países hacen referencia a debates o encuestas nacionales sobre los efectos no deseados de las pruebas nacionales. En estos países, las pruebas pueden tener importantes consecuencias para las escuelas, por ejemplo cuando los resultados de cada escuela son publicados o tenidos en cuenta en la evaluación escolar. Entre las consecuencias no intencionadas más comunes de las pruebas se encuentra el énfasis excesivo en la enseñanza en el aula sobre los temas objetos de examen, a pesar de que las pruebas sólo cubren una parte muy pequeña del plan de estudios.
3 comentarios:
Lo más lamentable es que los profesores se peresten a ser aplicadores y correctores de la pruebas CDI de manera voluntaria y que los equipos directivos cooperen a todo este montaje con un servilismo que da asco. Incluso mchos de ellos presumen en las páginas web de sus centros de los resutados, cuando saben bien que todo esto es miserable y una falta de compañerismo.
Es bastante descorazonador ver como el colectivo de profesores se humilla, y no sólo porque se lo impongan por la fuerza, sino porque quieren. Se rebajan a hacer habilitaciones, pedir comisiones de servicio y hacen la pelota al primero que se deja.
A mi lo que me resulta más repelente es que cuando hablas con algunos que han doblado el lomo, todavía se hacen la víctima.
Esta es mi respuesta: "Si doblas el lomo es porque quieres, luego no te quejes encima de que te duele la espalda. Los únicos que deberían quejarse son los que están en las listas negras de X. Gisbert".
Otra cosa desmoralizante es que el Ministerio de Educación no defienda la LOE, que ha aprobado el Parlamento español.
Recuerdo el texto del artículo 144.3 de la LOE. que es bastante clarito a este respecto de las clasificaciones de los centros.
“En ningún caso, los resultados de estas evaluaciones podrán ser utilizados para el establecimiento de clasificaciones de los centros” (artículo 144.3).
Aplausos Luis.
Si son ilegales las pruebas CDI, que a Esperanza Aguirre le manden a la guardia civil y la saquen esposada igual que hacen con los de la mesa de Herri Batasuna. ¿O no?
Cierto es. Da la sensación de que Esperanza Aguirre tiene impunidad (tanto jurídica como mediática) para hacer sistemáticamente un fraude de ley en la aplicación de las leyes aprobadas en el Parlamento.
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