¿No hay que tocarlo?
El País ha lanzado una encuesta con la pregunta "¿Te parece bien que se adelante el principio del curso escolar?" con dos respuestas ( "Si, el calendario actual esté mal repartido" y "No, debe seguir así") que ha generado una campaña defensiva bajo el lema "Maestros: nos quitan las vacaciones".
Entre los argumentos que corren por la red contra el adelanto están que "poco a poco nos van quitando lo poco que tenemos" y respondería a una conspiración donde "DESEsperanza Aguirre se ha confabulado con los medios de comunicación y pretende sacar a debate público nuestras vacaciones;es decir ha planteado votaciones para alargar el fin de curso y adelantar el comienzo del curso escolar...como lo oís y leéis...el primer disparo viene desde EL PAÍS" lo que conduciría a "un solo mes de vacaciones dentro de nada".
Aunque también se plantea que sea una "maniobra de distracción de la opinión pública, un falso debate … por una simple razón, a los de El País y a otros medios ahora les da por distraer a la gente de los problemas verdaderos (léase paro) con el rollo de que los profesores tenemos muchas vacaciones.
Tras estos argumentos se solicita el "no" en la encuesta que, claramente, va ganando.
Pero surge una pregunta ¿podemos renunciar a la reflexión sobre este tema? ¿O hay otros datos y tal vez el calendario actual esté mal repartido?
En primer lugar, la encuesta no dice lo que las críticas plantean. Iniciar el curso antes no tiene porque reducir las vacaciones sino reorganizar el calendario.
Conclusión, debemos centrarnos en los hechos no en las interpretaciones por defensivas que sean.
En segundo lugar, el debate no parece circunscribirse a Madrid, sino que ha surgido en Cataluña así como en Andalucía. En está última Comunidad se llevó a cabo el 24 de febrero un paro de una hora por este tema así como contra el fin de la jornada continua con una participación del 70% en Primaria y un 30% en Secundaria según la Junta de Personal Docente -formada por los sindicatos-. Los datos de la Consejería de Educación para toda Andalucía rebajan el número de docentes en huelga a un 22% y un 3% respectivamente.
En concreto Cataluña quiere adelantar el inicio del curso al 7 de septiembre y la semana de más tendría su contrapartida en la suspensión de las clases durante cinco días lectivos en el mes de febrero (ver El País 04.02.09) Y la misma fecha plantea Andalucía tras no obtener respuesta de los sindicatos a su solución intermedia de adelantar el calendario al 10 de septiembre (El País 5.02.09).
Conclusión, debemos cuidar nuestras argumentaciones de modo que no nos las puedan tumbar simplemente leyendo el periódico. Ni es un invento distractor inventado por el Páis ni está promovido por la Condesa de los Calcetines
En tercer lugar, ¿tiene sentido que el calendario escolar actual responda a una sociedad agrícola y religiosa? La razón para que el curso empiece a cámara lenta bien entrado septiembre parece tener más que ver con la vendimia que con el calor o con la organización escolar, del mismo modo que en Andalucía la recogida de la aceituna sacaba a los niños de clase en enero. Por otro lado resulta difícil defender desde la programación educativa y desde el rendimiento escolar que a quince días de las vacaciones de invierno se coloque el superpuente de la Inmaculada Constitución o que la duración interminable o escasísima de segundo y tercer trimestre dependa de cuando cae la primera luna llena de primavera lo que condiciona la celebración de la semana santa católica y, por lo tanto, el calendario escolar.
En cuarto lugar, esta semana de febrero que acaba, del 23 al 27 de febrero, son vacaciones escolares en Francia. Su curso escolar que empieza el 1 de septiembre sigue una cartesiana y educativa regla "7 semanas de trabajo y una de vacaciones" llegando a hacer oscilar las vacaciones de primavera a lo largo de tres semanas en función de las zonas del país con el fin de apoyar a la industria turística. Eso sí, estos periodos no lectivos no son cuestionados por los padres ya que en todos los colegios funcionan "actividades alternativas" para todos los niños que lo necesitan de 9 de la mañana a las 6 de la tarde. Así que piensan en la lógica escolar, piensan en el turismo y piensan en monitores de tiempo libre para todos los colegios.
El calendario escolar de Finlandia se ve afectado por la climatología. Este año han comenzado las clase el 11 o 12 de agosto. las vacaciones de otoño en la semana 42 o 43 del año con una duración de hasta una semana. La mayoría de las escuelas cerraron entre el 22 de diciembre y el 5 o 7 de enero. Las vacaciones de invierno se gradúan en las semanas 8, 9 y 10 del año comenzando por el sur y el curso escolar acaba el 30 de mayo. Unas fechas que permanecen estables año tras año. Ah, y es el país de Europa donde los niños asisten menos horas a clase.
En Reggio Emilia, el profesorado de la escuelas infantiles retorna a sus puestos de trabajo la última semana de septiembre para preparar el curso. ¡Las mejoras escuelas infantiles del mundo con dos profes por aula!
¿Quiere esto decir que deberíamos empezar el 1 de septiembre? ¿O que habría que reducir el descanso veraniego a 7 semanas? No, simplemente que es necesario debatirlo porque lo que hay no es lo mejor y porque lo que debemos defender en nuestro país (¿los paises madrileños?) no es el corporativismo sino la educación pública. Y además conviene hacerlo antes de que sea un motivo de desunión entre familias y profesores, algo que no podemos permitirnos es este momento y que ha ya ha sucedido en Andalucía
Para más argumentos puedes leer el reportaje de El País "Demasiadas vacaciones" del 5.02.09
3 comentarios:
Te enlazo un interesante comentario que circula por la red con más argumentos en contra de la modificación del calendario.
¿Qué te parece?
“Vacaciones Santillana”
Gracias por el enlace, nos ponemos a la lectura, aunque parece que este tema no se limita a nuestras fronteras
"Entre las medidas anunciadas por el presidente [Obama] se encuentra también la de hacer que los distintos Gobiernos estatales sean más exigentes a la hora de diseñar los temarios de las pruebas a las que someten anualmente a los alumnos de secundaria; ofrecer más fondos a las escuelas públicas; conceder más financiación para renovar las instituciones ya existentes, y una racionalización de la jornada escolar.
"Ya no nos podemos permitir un calendario académico diseñado para cuando Estados Unidos era una nación de granjeros que necesitaban que sus niños estuvieran en casa para arar la tierra al final de cada día", dijo Obama antes de pedir a los distritos escolares que incluyan más horas y más días de clase, "en el verano o a través de jornadas escolares ampliadas para aquellos niños que las necesiten"."
“Obama impulsa una gran reforma educativa para ganar competitividad”
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